13 de diciembre de 2010

#22 (capítulo 2)

Capitulo 2:

El evento comenzó a las cuatro de la tarde del sábado y acabo a las diez de la mañana del domingo. Así es que aparecí en casa a las once de la mañana con todo el cuerpo dolorido, los ojos como huevos, la cabeza a punto de estallar, e incapaz de pensar en nada que no fuera meterme en la cama y dormir. Pero antes tuve que soportar la inevitable bronca-sermón de mis padres que, en esencial, me hacía culpable de largas horas de angustia y preocupación, me recordaba mi compromiso de llamar si iba a llegar muy tarde y me amenazaba con recortarme la libertad que se me había concedido y que yo había mostrado no merecer.
En ese momento no tuve fuerzas más que para disculparme dando una breve explicación de lo ocurrido e irme a dormir.

¿Qué ocurrirá cuando despierte? En el próximo capítulo más. (:

No hay comentarios:

Publicar un comentario